Muchas son las personas que en determinado momento, porque no van a hacer uso de su coche durante un periodo más o menos largo, toman la decisión de proceder a la baja de vehículo temporal. De esta manera, logran evitarse el pago no sólo del impuesto de circulación sino también del correspondiente seguro.
Todo ello sin olvidar que, por supuesto, se deberá abonar la tasa establecida para estos casos que suele estar en torno a los diez euros.